AUTORIDAD

La autoridad del maestro es una condición necesaria para el aprendizaje. Es una relación establecida entre docentes y alumnos que ha ido variando según los contextos y las épocas.

Dicha relación debe ser asimétrica, con respecto a los alumnos, ya que es quien impone los límites de acción y comportamiento durante el desarrollo de su clase.

Esto fue lo que se sostuvo y se apoyó desde los inicios de la escuela. Pero las cosas han ido cambiando con el tiempo. El estado de la escuela como institución ya no es el mismo del de hace unos años. Sus funciones han ido variando, inclusive se han ampliado, asignándole a la escuela diferentes funciones para las cuales esta no estaba preparada ni le eran propias.

La escuela ya no es un lugar exclusivo donde los alumnos van a aprender. La escuela se ha convertido en un lugar de asistencialismo para sus alumnos. Alumnos con diferentes realidades, diferentes condiciones y dificultades que dificultan la tarea de enseñar por parte del docente. Docente que ya no es reconocido de la misma forma que antes.

La relación docente-alumno-familia ha sido alterada debido a las dificultades anteriormente nombradas. La familia anteriormente apoyaba cualquier iniciativa del docente, depositaba en él confianza para la educación de sus hijos. Hoy, no es así. El docente, si bien sigue siendo reconocido como tal, aunque no de la misma manera, es muy cuestionado por los alumnos y por sus familias y por la sociedad en general, ha ido perdiendo el prestigio y el reconocimiento que le eran propios.

Ya no se tiene el mismo vínculo docente – alumno. Personalmente creo que el docente ha perdido apoyo y con esto, ha perdido autoridad. Con esto no quiero decir que estoy de acuerdo con el tipo de autoridad que se ejercía durante la época tradicional de la escuela, autoridad sostenida y llevada a cabo por medio de la violencia, pero tampoco estoy de acuerdo con que sean los alumnos quienes quieran ejercer autoridad, pasando de un extremo a otro.

En síntesis, el poder de autoridad de los docentes se ha ido desdibujando y diluyendo con el tiempo.